lunes, 21 de julio de 2014

"Del Campo a la Cocina"





Costillas de  cerdo al horno en salsa barbacoa

Las costillas de lechón al horno es un plato principal excelente para quienes disfrutan del delicado sabor de esta carne, en una comida festiva. Una elaboración sencilla pero que conquista a los paladares más exigentes.



Ingredientes 

  1. 1/2 kilo de costillas de cerdo por persona
  2. 4 cucharadas de miel
  3. 3 cucharadas de azúcar
  4. 1 cucharada de salsa de soja
  5. 2 cucharadas de ketchup
  6. 1 cucharada de mostaza
  7. 2 cucharadas de vinagre 
  8. sal
  9. pimienta

Preparación


Lo primero que hay que hacer es separar todas las costillas y reservarlas en un recipiente hondo.
En un cazo ponemos la miel, el azúcar, la salsa de soja, el ketchup, la mostaza, el vinagre, la sal y la pimienta, es decir, todos los ingredientes menos las costillas y lo calentamos hasta que hierva, removiendo y mezclando los ingredientes, hasta conseguir una salsa homogénea.
Marinada barbacoa

Lo dejamos enfriar y cuando lo haya hecho, mezclamos la marinada con las costillas en el recipiente. Lo dejamos un par de horas para que la carne se impregne bien con la mezcla.
Costillas mezcladas con el adobocostillas en el adobo de cerca
Precalentamos el horno a 200 grados.
En una fuente de horno grande o si no fuera lo suficientemente amplia, en la misma bandeja del horno, ponemos un papel de aluminio y encima las costillas con el jugo de la salsa donde han estado reposando las costillas, y lo tapamos con papel de aluminio sellando bien los bordes del papel aluminio, como si fuera un papillote.
Costillas en aluminio abiertoCostillas en aluminio cerrado
Introducimos la bandeja en el horno durante una hora. Pasado este tiempo, la carne estará cocinada y tendrá aproximadamente este aspecto:
Costillas después del horno
Ahora, solamente falta que las pongamos un rato al grill para dorarlas por ambos lados y ¡ya están listas! Fácil y buenísimo.

Observaciones

  • Este plato se puede acompañar de ensalada o de una patata asada con un chorrito de aceite de oliva.
  • Si no quieres hacer la salsa de la marinada, otra opción más sencilla es hacerlo con tu salsa barbacoa preferida, la que suelas comprar. También quedarán estupendas.
Publicado por: Erik, Castro Estudiante del 8vo semestre de Ingeniería en Producción Animal      UNEG-Recría

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