ECO-INGENIERO

ADSORBENTE ORGÁNICO DE MICOTOXINAS: UNA NUEVA PROPUESTA.

A pesar de existir la posibilidad de controlar la concentración de micotoxinas a través de técnicas específicas de procesamiento, estas son, muchas veces, de difícil aplicación en la práctica de los sistemas modernos de fabricación de alimento. Por tanto, hay que encarar la realidad, aceptar el hecho de que los alimentos contienen micotoxinas y que algo debe hacerse al respecto. Estrategias prácticas de control de los efectos tóxicos de las micotoxinas sobre los animales de producción implican el uso de adsorbentes sintéticos o naturales en dietas contaminadas, reduciendo la adsorción de la toxina por el animal o su biodisponibilidad.

Adsorbentes como arcillas o carbón activado son relativamente eficaces, pero sus principales limitantes se derivan del hecho de que para poder ejercer un impacto significativo reduciendo la adsorción de micotoxinas, deben ser usados en altas tasas de inclusión, generando alto costo y además de reducir la densidad nutricional de las dietas.

Recientes avances, sugieren que ciertos glucomananos derivados de la pared celular de la levadura Saccharomyces cerevisiae 1026 pueden ser utilizados en bajas tasas de inclusión, reduciendo significativamente la biodisponibilidad de muchos tipos de toxinas.

El contenido de toxina que puede ser adsorbido en la superficie de la molécula de glucano es concentración-dependiente e influido por dos importantes características intrínsecas. En primer lugar, la cantidad de toxina adsorbida, en caso de alta concentración, está determinada por el número total de sitios de adsorción en la superficie de la molécula de glucano. La extensa y uniforme área superficial de la molécula básica de glucano permite que haya una alta capacidad de adsorción, incluso con tasas de inclusión bastante bajas.

Probablemente, lo más importante es la capacidad de la toxina de adherirse inmediatamente a la superficie del glucomanano. En el caso de varias micotoxinas, la adherencia es muy eficiente, ya que el glucano no es digerido en el tracto gastrointestinal. Las toxinas enlazadas al adsorbente son transportadas y excretadas del organismo del animal. Además, existe la posibilidad de introducir modificaciones en los glucanos, permitiendo la adsorción específica de nuevas micotoxinas a medida que vayan siendo descubiertas. Las arcillas inorgánicas tienden a presentar superficies menos activas con baja capacidad de adsorción, resultando en una adherencia bastante inestable.

ara evaluar la capacidad de reducción de la toxicidad sinérgica de micotoxinas en pollos de engorde con el uso de glucomananos, en dietas a base de maíz naturalmente contaminado con hongos o artificialmente contaminado con aflatoxinas sobre el desempeño y evolución de órganos viscerales, se formularon  dietas a base de maíz sin micotoxinas y salvado de soya, de acuerdo con las exigencias del NRC (1994) y las otras con maíz naturalmente mohoso 0.3 ppb aflatoxina, 0.68 ppm zearalenona, 4.5 ppm fumonisina, 0.39 ppm toxina T2 y 1.4 ppm DON que fueron utilizadas para producir los demás tratamientos.

A los 35 días de edad, se sacrificaron los animales y se observó un efecto sinérgico entre las toxinas presentes en el maíz mohoso y la aflatoxina adicionada a las dietas, ya que la inclusión de solamente maíz mohoso no produjo consecuencias negativos en las aves. La inclusión del adsorbente minimizó el efecto nocivo de la toxicidad producida por la sinergia entre el maíz mohoso y la aflatoxina.

Fuente:http://www.ppca.com.ve/va/artlibresva/artlibresva.html#4

        Publicado por: Juan Pablo Azocar Cherani.

        Estudiante del 8vo Semestre de Ingeniería en Producción Animal.